domingo, 24 de noviembre de 2013

Bosc de Ruscalleda o Bosc Encantat de Orrius



Este bosque se encuentra en término municipal de Orrius, en la Serralada del Litoral, entre las poblaciones de La Roca del Vallès y de Vilanova del Vallès en Barcelona.
Para empezar la ruta recomiendo dejar el coche al final de la calle Ruta de la Prehistoria (y digo final porque se acaba la calle) de Vilanova, si hay sitio. Andando retrocedemos unos metros y empezamos en la calle de la Roca Foradada donde ya hay letreros a seguir de la Ruta Prehistórica.
A partir de aquí vamos encontrando señalizaciones de los diferentes sitios a visitar. El bosque es inmenso y con infinidad de caminos, por ello nosotros escogimos un recorrido de GPS en wikiloc que va por todo lo interesante: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=1284290
Está todo marcado y descrito salvo el Moai y el Elefante de piedra (que no son prehistóricos), que hay que ir un poco al tanto para verlo y no pasárselo de largo. Estos no están anunciados en el camino.
Nosotros tardamos unas cuatro horas para hacer los 11 kms. Hicimos fotos, recorrimos todos los sitios por delante y por detrás, buscamos setas, buscamos un caché, comimos madroños, en fin una mañana agradable a pesar de que algunos caminos tenían agua de la lluvia caída en estos días.
Ver algunas fotos.
https://plus.google.com/photos/116433042173684107400/albums/5949892153261249441/5949892214396992274?pid=5949892214396992274&oid=116433042173684107400

miércoles, 13 de noviembre de 2013

"Es una injusticia queridos amiguitos"


Me pregunta el Facebook ¿Qué estas pensando?....................... y yo digo como el pobre Calimero “es una injusticia, queridos amiguitos”.
Vivimos en un pequeño globo llamado Planeta Tierra y lo único que se nos ocurre es pelearnos entre nosotros y sacar nuestros más bajos instintos como la envidia, el desprecio, la avaricia, la codicia, el egoísmo, el ansia de poder, el odio, el poder, la violencia, etc.
A esto le añadimos las enfermedades, el miedo, los accidentes, nuestra corta vida, las catástrofes ambientales y climáticas, el hambre, la muerte y otro largo etc.
¿Qué nos queda? Pues nos queda una vida deplorable y sin corazón que nos lleva a un final deplorable.
Con lo bien que podríamos estar todos disfrutando de la Naturaleza, los bienes que nos proporciona la Tierra, las relaciones humanas y el amor, pero………………..
En fin, debe ser mi “Otoño” y el Otoño del calendario que todo junto me hace ver las cosas de una manera un poco o un “mucho” pesimista.


viernes, 26 de julio de 2013

Camino del Norte I, Irún – Castro Urdiales, 2013


Este año conforme iba llegando el momento de partir al Camino, nos estábamos inquietando cada vez más. Primero por el recuerdo de la lesión del año pasado, segundo por el tiempo que estaba haciendo (todo el mes de mayo lloviendo por el País Vasco), tercero por el flojo entrenamiento que llevábamos y por último y muy importante, por la difícil orografía del terreno que íbamos a llevar según los perfiles y las referencias que teníamos.
En vista de todo lo anterior, nos marcamos unos objetivos bastante asumibles en cuanto a la largada de las etapas, además nos iba bien por los pueblos o ciudades que queríamos visitar. Una vez allí en el día a día íbamos escogiendo las etapas más cortas donde habían dos opciones, porque la verdad es que la orografía y el tiempo iban en contra nuestra, con fuertes subidas, fuertes bajadas, lluvia, barro, aire, más barro, humedad, ríos de agua en el camino, mucho más barro y algún día sol. Estabas en lo alto de una montaña y veías una bajada en picado hacia la Ría y seguías mirando enfrente hacia donde tenía que volver a subir y te daba una flojera en las piernas.
Iniciamos el Camino dentro de la primera quincena de Junio.
Tuvimos algún conato de lesión, pero se quedó en nada.
En la parte positiva tenemos, unos paisajes espectaculares de acantilados, verdes praderas, muchos animales, buenos caminos, buena comida y gente muy amable.
En cuanto a lo negativo, aparte de lo mencionado anteriormente del terreno y el tiempo, destacaría la falta de albergues y sobre todo que los albergues abrieran a las 15 horas. Si no haces etapas muy largas, hay mucho tiempo de espera y luego todos en tropel hacia las duchas y lavaderos. Otro problemilla, fue mi alergia al polen los primeros días.
Ha sido un Camino diferente llevando el mar a nuestro lado y con esos paisajes tan verdes. La media por día de kilómetros ha sido la más baja, 17’5 kms por día. Han sido 193 kms en 11 días. La etapa más larga fue de 25 kms y la más corta de 7’6 kms para llegar a San Sebastián.
Hemos parado en Irún, Pasajes, San Sebastián, Zarautz, Deba, Marquina, Gernika, Lezama, Bilbao, Portugalete, Pobeña y Castro Urdiales (Cantabria).
Ya llevamos acumulados 2.300 kms en El Camino.


sábado, 12 de enero de 2013

Mis deportes 2012


Adiós 2012 y bienvenido 2013.
Este año ha sido especial por varias razones que ya iremos desgranando.
Empezamos por el baile que sigue siendo dos horas semanales de clase, más las saliditas a diferentes salas de baile o eventos festivos. Este año destacar la actuación de la clase en el Ateneo de Cerdanyola para una ONG que tiene en proyecto construir pozos de agua en Burkina Faso (África).
En cuanto a andar, este año ha sido movidito. Para empezar a entrenar fuimos por la costa desde Mataró hasta el Hotel Vela de Barcelona en tramos cortos de 5 kms de ida y otros 5 de vuelta para buscar el coche, unos 60 kms. También como entreno y esta vez con nuestro hijo Carlos, hicimos el Camí de Sant Jaume desde el puerto de Barcelona hasta el Monasterio de Montserrat en 5 etapas y con un total de 63’5 kms. Otra que hicimos fue desde Cerdanyola hasta el Tibidabo y la vuelta, 31 kms. La salida reina fue El Camino desde Ourense a Santiago, 114 kms con Carlos durante 5 etapas a una media de 22’7 kms por día, en este tramo hicimos los 2000 kms en el Camino. Después Manoli y yo seguimos para llegar a Finisterre y Muxia, pero dos etapas después vino el “tío del mazo” y jorobó a Manoli con un lumbago y tuvimos que desistir de seguir y volver a casa, fueron 53 kms más. Acabando el año subimos a La Mola por la parte larga y además subimos a Sant Jeroni de Montserrat desde el aéreo. A parte, las salidas por Collserola. Creo que en total pueden pasar los 400 kms.
El siguiente apartado es el de Correr. Este apartado ha quedado un poco relegado sobre todo en cuanto a carreras. Sólo he corrido 4 carreras, dos de ellas han sido en Bagà, una en Cerdanyola y otra en Matadepera para poder seguir en la liga Champion chip. No he dejado de correr porque he seguido entrenado, he corrido 1000 kms, a una media de unos 20 kms semanales.
El plato fuerte de este año ha sido la bici. Como la bici de montaña que tenía ya me la compré de segunda mano y ya tenía más de 15 años, decidí comprarme una nueva. Qué diferencia de tecnología. Debido a las horas solares y los cambios de hora, yo sólo cojo la bici con la hora cambiada, o sea de abril a octubre, siete meses. En este tiempo, este año he hecho 1712 kms a una media de unos 50 kms a la semana. Como etapas a destacar, diríamos ir al hotel Vela en Barcelona (46 kms), al final de la Carretera de les Aigues (50 kms), una vuelta por La Cerdanya por la Collada de Tosses y la Molina (52 kms), a Premiá (60 kms), como algo duro (dentro de lo que cabe) subir al Monasterio de Montserrat (98 kms) y para rematar el final de temporada Sant Celoni/Gualba 102 kms. Recordar que es una bicicleta de montaña y de que voy solo. Estoy súper satisfecho. El año que viene, más retos.
Entre andar, correr y bicicleta, he hecho el equivalente del recorrido desde Cerdanyola a Ámsterdam, ida y vuelta.
A finales de 2012, compramos un GPS de montaña que nos permite bajarnos de internet recorridos efectuados por otros usuarios en Wikiloc y seguirlos fielmente. Además estamos involucrados en el Geocaching, que consiste en buscar “tesoros” ocultos por todo el mundo a partir de unas coordenadas y con la ayuda del Gps.
Otro tema que llevamos en danza, es una actividad de la Federación Catalana de Excursionismo de “Els Cent Cims”. Son las cien cimas más emblemáticas de Catalunya, estamos subiendo y anotando cimas. Ya nos quedan menos.
Como se puede ver, la cosa es un no parar. Como decía una valla publicitaria de un anuncio de ron: “Descansa cuando mueras”.
Aunque nuestros queridos políticos y demás jerarquía nos recorte por todas partes, no nos puede quitar las ganas de vivir y de disfrutar a pesar de las dificultades. Como ya dije, “no es más feliz el que más tiene si no el que menos necesita”, no hace falta mucho para ser feliz.
“Pos eso”, salud y kilómetros.